Armarios modulares tempest
Cuando la información confidencial desencriptada, en soporte electrónico, necesita protección, los centros de comunicaciones responsables de su manejo pueden optar por proteger las zonas donde esa información se trata, o los equipos concretos que la operan.
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Las soluciones enfocadas a proteger zonas electromagnéticamente, suelen consistir en encajar cerramientos metálicos en la infraestructura a proteger, y se conocen como salas seguras o salas TEMPEST.
Las soluciones enfocadas a proteger equipos electromagnéticamente, suelen consistir en revestir mediante cerramientos metálicos, o metalizaciones de sus propias carcasas, cada terminal a proteger y se conocen como equipos o terminales tempest.
Un equipo protegido puede transportarse y tiene un coste inferior a una sala segura, pero como contrapartida, en una sala segura se puede renovar, con equipos convencionales, cualquier dispositivo de información que hubiera quedado obsoleto, sin efectos sobre la seguridad, sin más que añadir algún conector pasamuros o algún filtro en caso necesario; sin embargo, cuando un terminal protegido queda obsoleto, queda obsoleta su protección, no pudiendo aprovecharse para un equipo convencional, lo que obliga a adquirir un nuevo equipo especialmente protegido con el coste y demora que ello implica.
Un caso particular de protección de equipos más versátil, es la protección electromagnética mediante uso de racks apantallados, que por su capacidad de albergar diferentes formas y tamaños, permiten la renovación de equipos obsoletos sin adquirir nuevas protecciones.
A este efecto, los Racks apantallados presentan una limitación derivada directamente de su diseño: pensados para albergar instrumentación concreta, el restringido espacio destinado a albergar conectores pasamuros o filtros adicionales limita el tamaño, el número y la capacidad de actualización de los dispositivos que pueden albergar.