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Desde luego una cámara termográfica de altas prestaciones, desde nuestra opinión, debería cubrir los siguientes aspectos:

• Alta sensibilidad: Clave para poder detectar los cambios de temperatura más pequeños, recordemos que estamos hablando de termografía científica por lo que ser capaces de caracterizar los cambios de temperatura más ínfimos marcará la diferencia entre un descubrimiento o un nuevo intento.
• Alta resolución: De nuevo, una de las principales características a tener en cuenta de una cámara. Este parámetro determinará la exactitud, definición y buena caracterización de nuestros ensayos.
• Alta velocidad:  Siguiente en el mundo científico del I+D, muchas veces estaremos hablando de procesos muy rápidos en los que normalmente querremos ver qué sucede en un determinado material hasta llegar a su régimen estable. Este tipo de eventos suceden décimas de segundo para los que por regla general, 50 o 60 Hz se quedan muy cortos.
• Compatibilidad: El poder contar con un software estable, versátil en lo que a funcionalidad y compatibilidad con terceros se refiere.
• Versatilidad: Posibilidad de utilizar lentes intercambiables (desde teleobjetivos a lentes macro) y quizá por encima de todo la portabilidad, pueden hacer de una cámara el complemento perfecto a nuestros ensayos y estudios sobre todo si debemos ceñirnos a laboratorios no muy convencionales.

Por todo esto, nos complace presentar la nueva cámara FLIR T1030sc de nuestro partner FLIR, una cámara que reúne estas citadas condiciones y muchas otras para ser el compañero de trabajo ideal de muchos laboratorios científicos.

La nueva cámara T1030sc cuenta con una sensibilidad de tan sólo 20mK abre el abanico a toda una nueva serie de ensayos ya que, gracias a esta gran sensibilidad, permite el realizar grabaciones en alta velocidad (llegando a 480Hz) que hasta este momento, solamente estaban al alcance del usuario con otro tipo de tecnología. Además y gracias a su detector de 1024x768 píxeles y al sistema UltraMax podremos obtener imágenes con una nitidez nunca antes vista y ¡¡una resolución total de hasta 3.1 Megapíxeles!!
 
Por supuesto dentro de la nueva gama de cámaras portátiles de FLIR T1K, además de esta versión científica está disponible la mejor cámara termográfica del mercado para mantenimiento y edificación, la T1020, que goza de las mismas prestaciones que su “hermana científica” salvo las prestaciones específicas de alta velocidad.